jueves, 28 de abril de 2011

Desde el 24E.

Intento tras intento fui fracasando sin remedio. Puede ser la incapacidad de soportar el no poder conectarnos o la posibilidad de gritarte que te echo de menos. Cada día, cada mañana, cada hora. Mi corazón late más deprisa cuando la cabeza gira a la izquierda.. Y te siento renovado, inesperado, desconocido. Pero yo sigo confiando en el tiempo. Porque al fin y al cabo, siempre es el tiempo..

No hay comentarios:

Publicar un comentario